13 sept 2011

Prebase de sombras casera

Hello everyone!

¿Qué tal la "vuelta al cole"? Espero que no muy dura ;)

En esta ocasión, os traigo una pequeña recopilación de recetas muy sencillas para elaborar una prebase para sombras con productos que probablemente tengamos en casa.
Ya sabéis, la prebase de ojos se aplica antes de cualquier sombra para igualar el tono del párpado, para que se fije mejor el producto que pongamos encima y, por supuesto, para que también aguante más tiempo en la piel.
Si no tenemos prebase, también podemos usar un corrector sencillo en tono piel o aplicar la misma base de maquillaje en el párpado; no hace el mismo efecto pero da un resultado parecido.

Evidentemente, no tiene por qué utilizarse este producto siempre que se vaya una a maquillar, pero sí en ocasiones en las que, o bien no pigmentan bien las sombras que tenemos, o bien queremos un maquillaje más intenso y duradero por una cena, una boda, una sesión de fotos...

Para elaborar la prebase casera, hacen falta básicamente dos productos, un corrector y un gloss, pero algunas variantes incluyen productos alternativos que se pueden añadir según las necesidades personales.
Evidentemente, si ya se tiene una prebase de este tipo, no es necesario hacer otra casera, pero siempre es interesante conocer las alternativas, y es también una manera de darle uso a productos que quizá no usamos.
También es importante comentar que las cantidades deben ser muy pequeñas, porque hay que andarse con cuidado con el tema de la caducidad, así que es mejor hacer una pequeña prueba y, si nos funciona, elaborar algo más de cantidad.
Al aplicar la prebase casera, puede que quede una textura algo más líquida o acuosa, por lo que es mejor esperar un poquito a que seque en el párpado antes de aplicar las sombras encima.


Fórmula con los dos ingredientes básicos:

Corrector + Gloss

El corrector puede ser cualquiera, pero el más aconsejado es el típico corrector en barra o stick en tono piel, ya que tiene una textura cremosa más adecuada para el uso que le daremos.
El gloss o brillo de labios. En este caso, lo más importante es que sea muy denso, mejor incluso si es pegajoso, y preferiblemente de tono transparente o muy claro.

Proceso:
Simplemente, hay que mezclar una pequeña cantidad de estos dos productos (en un tarrito que se pueda cerrar para reutilizar el sobrante) con ayuda de una espatulita o un palillo hasta conseguir una pasta uniforme, lista para usar.


Fórmulas con ingredientes alternativos:
(siempre mezclándolo todo hasta obtener la misma pasta uniforme)

1. Corrector + Gloss + Hidratante (cremosa o líquida)
2. Corrector + Gloss + Base de maquillaje (mejor líquida, y mejor aún si es de larga duración)
3. Corrector + Hidratante + Base de maquillaje + Polvo de rostro (suelto, o rascando uno compacto)
4. Corrector + Gloss + Hidratante (o body milk) + Glicerina (una  gota).
    En este caso, si se desea, se puede añadir a la mezcla pigmento de algún color para conseguir una especie de sombra en crema
o base de color
5. Base de maquillaje (cualquier textura) + Hidratante.


No os he icluido imágenes del proceso, pero si os interesa ver el resultado, ya me lo haréis saber, ok?

Espero que os haya sido útil.
Hasta la próxima!

1 comentario:

  1. Lo probaré porque las prebases hechas me parecen un poco caras, sobre todo si no las usas mucho, no? Gracias!

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